Desde hace algún tiempo estoy alternando lecturas de novedades con relecturas de etapas que en su día me dejaron buen sabor de boca. En esta ocasión le ha tocado al Namor de John Byrne. Para mi el mejor Namor que se ha escrito. Esta serie la sacó en su día Planeta en un formato cuasi pretigio (al igual que el Spiderman de Mcfarlane) y duro 14 números. Después de cerrar la colección por falta de ventas, salió un tomo de Grandes Sagas con el que cerró toda la etapa de John Byrne.
En los 14 prestigios, John Byrne ejerce de autor completo: Guión y dibujo. En cuanto al guión, Byrne da un cambio al personaje, justificando su actitud anterior y creándole, vamos a decir, una nueva personalidad más acorde con la de un personaje principal y heroe de una serie. Dota al personaje de todo un entorno que va enriqueciendo. Las tramas van sucediendose pero John Byrne va sembrando semillas en la historia que va contando para futuras tramas. No es una obra maestra pero es muy entretenida además de ir recuperando personajes que llevaban tiempo olvidados.
En cuanto al dibujo, ya se va notando cierta decadencia y mejor trabajo en el mismo. Tanto los episodios en los que se entinta el mismo como en los que es entintado, el dibujo no brilla como en otras ocasiones. Está bien pero este no es ya el Byrne que triunfó en series como La Patrulla-X, Vengadores o Los 4 Fantásticos. Se nota dentro de un mismo episodio que ha tenido días mejores y peores.
En resumen, es una lectura muy entretenida. La historia está contenida en la serie, a pesar de que hace referencias a la serie de Iron Man, de la que Byrne era guionista en ese momento, y no hace falta haber leído nada para disfrutar de la lectura.
Puntuación: 7/10
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